El mundo de la belleza y la dermatología caminan de la mano desde siempre. En la búsqueda por la harmonización y simetría del rostro, los procedimientos dermatológicos son parte esencial de este conjunto y hoy en día combinar tecnologías en una misma sesión para que el paciente tenga resultados más rápidos y eficientes se ha convertido en una excelente estrategia.
Según el Dr. Daniel Dziabas, especialista en Dermatología por la Sociedad Brasileña de Dermatología y miembro titular de la Sociedad Brasileña de Cirugía Dermatológica, los tratamientos combinados llegaron para facilitar y optimizar resultados. «La gran ventaja en la asociación de tratamientos es que se puede abordar la piel del paciente en diferentes aspectos y capas, tratando de manera más completa y complementaria».
La combinación de procedimientos implica diferentes tecnologías como el ultrasonido micro enfocado con láser y/o la radiofrecuencia o hasta tecnologías con tratamientos inyectables, como el ultrasonido micro enfocado con la aplicación de estimuladores de colágeno, ácido hialurónico o toxina botulínica. «El paciente sale muy satisfecho de las sesiones, pues logra ver mejores y más rápidos resultados», de acuerdo con el médico. También, según el dermatólogo, tratamientos que involucran el ultrasonido micro enfocado Liftera no necesitan de estaciones del año ideales para su realización pues no poseen relación con el Sol o altas temperaturas. «Las tecnologías dermatológicas están tan avanzadas que hasta el láser utilizado hoy en día no son tan agresivos y no descaman la piel. Lo que es muy importante es seguir siempre las recomendaciones del profesional que te acompaña, eso garantiza eficiencia y piel sana a largo plazo», dice Dziabas, experto en armonización facial completa con la asociación de láseres, toxina botulínica y rellenos faciales.
El número de sesiones de tratamientos combinados puede variar según la indicación médica, la elección de cuáles serán las tecnologías y el resultado esperado. «Con Liftera es posible hacer una sola sesión, los láseres dependen de 3 a 4 sesiones, mientras que tecnologías inyectables – estimuladores de colágeno, ácido hialurónico y toxina botulínica – varían según en la edad del paciente y pueden llevar hasta de 1 a 3 sesiones», finaliza Daniel.