La blefaroplastia se conoce como la cirugía plástica responsable de reducir o extirpar el exceso de piel y grasa en los párpados. Hay que tener en cuenta, que con el paso de los años, el envejecimiento de la piel provoca que los párpados cauda y los músculos que los sostienen se debilitan. Esto causa que se acumule grasa en la parte inferior y superior llevando a lo que se conoce como cejas flácidas, párpados superiores caídos y bolsas debajo de los ojos.
Desde Liftera hemos hablado con el Dr Carlos Jarne de la Clínica Toscana en Barcelona. Este especialista viene estudiando las infinitas posibilidad de Liftera y conociendo cada vez más esta tecnología a casos como por ejemplo la blefaroplastia. A la pregunta: ¿es necesario recurrir siempre a una blefaroplastia para reducir el exceso de piel y grasa en los párpados? él nos lo deja claro, «no, no es necesario» y nos lo explica así a continuación.
La Blefaroplastia se realiza bajo anestesia local y sedación, sin hospitalización y con muy buenos resultados. Pero no siempre hay que recurrir a ella. La tecnología actual como el HIFU nos permite tratar la piel en distintas capas, generando un efecto de tracción cutánea. El HIFU de ultrasonidos microfocalizados, conocido como Liftera, permite en estos casos: disminuir el volumen de compartimentos de grasa cuando hay bolsas debajo de los ojos, promover un efecto lifting en la piel de los párpados y estimular la producción de nuevo colágeno. Este HIFU se caracteriza por generar micropuntos de coagulación, controlados digitalmente, causando un calentamiento a medida de las distintas capas de la piel. Es indoloro y sin sintomatología post tratamiento.